jueves, 24 de abril de 2014

LUNES 18 DE OCTUBRE. DE PAMPLONA A PUENTE LA REINA










LUNES 18 DE OCTUBRE. DE PAMPLONA A PUENTE LA REINA



A las seis de la mañana nos despertó la "simpática" muchacha de guardia en el Albergue de las Hermanas Adoratrices, comenzando así un nuevo día. La noche anterior, Helena se había marchado a casa ya que su aventura acabó con el fin de semana ya que tenía que incorporarse a su puesto de trabajo hoy Lunes.

La etapa de hoy constaba de 32 kilómetros y se iba a convertir en un fascinante viaje por tierras del Norte.
Desde el bello puente de la Magdalena sobre el río Arga , tomé dirección entre murallas hacia el Portal de Francia. La salida de Pamplona fue fácil y en línea recta , casi sin darnos cuenta , abandonamos la ciudad y entramos en un inmenso campo inundado de trigos.

El cielo estaba despejado y hacía calor para la época del año en la que estábamos. Iñigo el donostiarra y Karlos el gaditano, ascendían el mítico alto del Perdon
 Salimos de Zariquiegui por una pista que, llaneando, llega a un barranco, donde se continúa por el camino antiguo que asciende a media ladera. El camino se convierte en una senda estrecha que bordea los cultivos. 

Llegamos a un pastizal con unas bordas en ruinas. Monte abajo, la boca sur del Túnel del Perdón se traga la autovía; por encima de nuestras cabezas giran las gigantescas aspas de los aerogeneradores del Parque Eólico. Un camino excavado en la roca conglomerado conduce a la cresta, donde se expone a los vientos un bello monumento al peregrino. El lugar disfruta de una excelente panorámica de la Cuenca de Pamplona.
Mientras subíamos hablamos de Helena. Oye Iñigo, se echa de menos a Helena ¿verdad?. Sí , contestó Iñigo, sobre todo a la hora de orientarnos , ella siempre era la primera en ver las flechas amarillas que nos indican el camino a seguir. Ambos coincidimos en calificar a Helena como una buena persona y una excelente compañera de viaje.

También recordamos a Ana , la chica de Madrid que habíamos conocido en el albergue. ¿Que tal estará? ...
En ese momento en que hablaban de Ana, se cruzaron dos chicas italianas antes nosotros y nos miraron esbozando una sonrisa muy contagiosa. Más tarde supimos que eran de Milán y venían al Camino una semana y en ese tiempo recorrer todo lo que pudieran.

Finalmente alcanzamos la cima, coronada por multitud de molinos de viento. La bajada se presentaba terrible , peligrosa y con muchas piedras que hacían que andaras con sumo cuidado ya que era fácil doblarse un tobillo o sufrir un accidente que te enviaría de vuelta a casa.

Karlos, seguramente mañana nos separaremos , dijo Iñigo, ya que me vuelvo para Donosti. Mañana mismo salgo para El Mar Rojo y no quiero llegar con demasiadas ampollas en los pies. Allí me espera otra aventura muy distinta a ésta.

Esta noticia me entristeció, no quería que mi amigo y compañero de viaje se fuese, me caía bien y mantenía conversaciones muy entretenidas. Pensé en que no debía de estar triste ya que había comenzado sólo el Camino y todas las personas que fuese conociendo debía de tomarlo como un verdadero regalo del Cielo y seguramente durante mi peregrinar iría conociendo a más personas que tal y como sucede en la vida misma, te acompañan en algunas etapas y a veces te encuentras con ellas o quizás no . En ese momento sentí que me estaba emocionando , el Camino me estaba dando otra lección y me enviaba otra señal. La vida y el Camino, el Camino y la vida son muy paralelos son una misma cosa. Pensé en toda la gente que había conocido en mi Vida y que nunca más volví a ver , reflexioné en que en ciertos momentos esas pesonas tuvieron una misión en mi historia y que ya no hacía falta que permanecieran , sin embargo otras nuevas iban aparenciendo.

Iñigo, yo voy a visitar la Ermita de Eunate, nos vemos en Puente de la Reina. Está bien , Karlos nos vemos allí. Nos dimos un abrazo y me perdí entre la espesura de la vegetación mediterránea que se ofrecía como paisaje.

A la luz del crepúsculo o aprovechando el sutil color del amanecer. Es el mejor momento para descubrir una de las iglesias más bonitas y sugerentes del Camino de Santiago, la de Nuestra Señora de Eunate (1170), sencilla, original y misteriosa.

Se alza, solitaria, poco antes de llegar a Puente la Reina  en medio de un llano y abierto paisaje que en verano toma el color de los girasoles. Su planta octogonal y el claustro que la circunda la hacen diferente a cualquier otro templo románico.

El misterio no aclarado sobre su origen y su inquietante interior avivan el interés de este templo que fue hospital de peregrinos, dormitorio de difuntos, faro-guía para caminantes, lugar de culto cristiano y santuario telúrico para quienes buscan fuerzas esotéricas.

Tomé un desvio a la derecha e inicié un largo camino hacia abajo dónde descansaban unos enormes viñedos de los que extraje su fruto , un enorme racimo y comí sus uvas. Estaba en tierras riojanas , cuna de uno de los mejores vinos del mundo.

La Ermita de Eunate era de forma octogonal y no muy grande. En la puerta principal que estaba cerrada se podía leer. " Por favor si entran en la iglesia, quítese la mochila y las botas y oren en silencio".

Dí tres vueltas alrededor de la Ermita anunciando a los tres nombres del Misterio ( Padre , Hijo y Espíritu Santo). Trás dar las vueltas entró descalzo y se arrodilló ante el altar presidido por una virgen coronada con un niño Jesús de pié entre sus brazos.
La imagen en la soledad de la ermita me sobrecogía. En ese lugar se podía oir las almas de peregrinos que habían parado a rezar ante la imagen de nuestra señora.
Pedí por mi  padre, pedí que me  protegiera en el Camino , pedí por mi madre y por que mi relación con ella mejorase , también pedí por mi futuro trabajo como Director de hotel, al que me incorporaría una vez finalizado el Camino de Santiago.

Permanecí orando un buen rato , quizás horas aunque el tiempo pasara como un suspiro.

Una vez abandoné la Ermita, enfilé el Camino aragonés en dirección a Puente de la Reina y al cabo de unas dos horas alcancé el albergue llamado de los Padres Preparadores, el cual era muy  antiguo pero al menos muy confortable.

De nuevo se incorporaron al albergue peregrinos con los que ya había coincidido en otras etapas. Puede vera a Juan el antequerano, la chica americana y la amiga brasileña, también estaban una pareja que había conocido antes, él de Barcelona y ella de Lugo y que iban en peregrinación a la tierra de la chica.

En ese momento recordé un párrafo de Jose Luis Borges que dice así:" Con el tiempo verás que aunque seas feliz con los que están a tu lado, añorarás terriblemente a los que ayer estaban contigo y ahora se han marchado."

(CONTINUARA)



martes, 22 de abril de 2014



Domingo 17 de Octubre. De Zubiri a Pamplona


Trás desayunar en el bar de Andrés, los tres peregrinos, Iñigo ( de Donosti), Helena ( de Pamplona) y Karlos ( de Cádiz), enfilaron el camino hacia Pamplona. Nos esperaban 20,4 Km de caminata hasta llegar a nuestro destino.

Hacía un día precioso y aún quedaba alguna nube en los altos de las montañas. El paisaje era fascinante. Una vez más cruzamos grandes praderas de abundante vegetación, a la derecha del Camino, discurría el río Arga, abrazado desde la salida de Zubiri hasta las puertas de Pamplona. A pesar de las cuatro horas de etapa que nos esperaba, el Camino era propicio para disfrutar de un pequeño respiro y disfrutar del hermoso paisaje que se presentaba ante nosotros.

Me sentía muy feliz y cantaba mientras caminaba. En ese momento vino a mi mente la conversación mantenida con la camarera del restaurante de Roncesvalles la noche anterior durante la cena. Me reveló , que Paulo Coelho nunca llegó a hacer el Camino de Santiago al completo tal y como afirmaba en su libro. En realidad había hecho una excursión al lugar y el Camino le sirvió como fuente de inspiración para escribir su libro "El Peregrino de Compostela, Diario de un mago". ( Planeta 2008).

Me sorprendió de la manera en que su libro me había influido para estar ahí, con mi mochila  a mi espalda, dispuesto a recorrer el camino santo , a miles de kilómetros de casa y todo por un libro cuyo autor nunca había sufrido la dureza del Camino. Más tarde , el propietario del bar de Andrés , corroboró esta afirmación ya que Coelho acudía a su bar y sentado durante horas se dedicaba a narrar en una grabadora historias fantásticas del Camino , que nunca llegó a vivir. 
Para mí, fué una gran desilusión descubrir este hecho , me parecía mentira.

De repente , la voz de Helena , me sacó de mi ensimismamiento. Karlos, espera que agarro la cantimplora que se te va a caer de la mochila., la llevas bailando de un lado hacia otro todo el tiempo.
Hablamos y hablamos durante toda la etapa. Conversamos sobre mi vida, mi matrimonio, de los amigos, de mi hijo Javier...
También hablamos de mi padre, de cuánto amó a mi madre, de como desde su enfermedad se había convertido en su fiel compañero. Le expliqué lo mal que mi madre se había portado con él desde el egoismo de su "enfermedad", hablamos de mi compromiso ante mi padre, de como trabajé haciéndome cargo de su negocio alternándolo con mi empleo, de lo poco que dormía, del durísimo proceso de mi separación matrimonial, de la infinita crueldad de mi ex mujer que apenas me dejaba ver a Javier y cuánto me hacía sufrir...
Hablamos de la capacidad de perdonad de un ser humano a alguien tan cercano como puede ser una madre ó más bien de aceptar la responsabilidad de cuidar de ella ante la falta de mi padre, aún siendo incapaz de olvidar lo que hizo con mi padre.
Bueno Helena, mejor dejo de contarte historias para no dormir y te dejo disfrutar del Camino. Ella asintió; se dió cuenta que no quería seguir hablando del tema.

A medida que hablaba, andaba, daba rienda suelta a mis sentimientos, notaba como se abría el alma y el dolor de mis heridas sanaba, muy poco a poco, pero sanaba. Esto es otro milagro del Camino.
Por fín llegamos a un pueblo llamado Villalba, conocido por ser la cuna del famoso ciclista Miguel Indurain y paramos a comer.
Iñigo , el donostiarra,nos confesó durante el almuerzo , su pasión por el cine en blanco y negro además de su admiración por Gary Grant. Entonces, todos comenzamos a hablar de que pelis nos había marcado más en la vida y la verdad.. se nos pasó el almuerzo volando.
A la hora de partir de Villalba, cruzamos las murallas de Pamplona e hicimos entrada por la Puerta de Francia en dirección al Albergue de las Hermanas Adoratrices , lugar dónde pasé la primera noche de mi aventura.

Trás inscribirnos y sellar nuestras credenciales, subimos a los dormitorios a dejar nuestras mochilas, allí conocimos a Ana, una guapísima madrileña que había decidido hacer el Camino sóla. Nos presentamos y nos hicimos una foto de recuerdo.
Helena y yo nos separamos de Iñigo, quién cayó destrozado en la cama trás la dura etapa. Yo me sentía bastante cansado y me dolían los pies , pero había quedado con una familia de Burlada que dias atrás había cononcido en el Hotel dónde yo trabajaba.
Trás la cena, regresé al albergue y entré en la zona de literas para despedirme de Helena. La miré a los ojos  y apretando su mano , le dí las gracias por todo. Gracias por acompañar en este viaje a un completo desconocido y confiar en mí. Jamás te olvidaré, le dije mientras la abrazaba. En ese momento supe que estábamos sellando un lazo de amistad que debía de ser para siempre, por que así lo quiso el destino, se encaprichó en que dos peregrinos que no se conocían de nada se conocieran y decidieran compartir esa experiencia maravillosa por tierra santa.

Trás despedirme de Helena , me retiré a mi litera y me quedé boca arriba sobre mi cama, cerré los ojos  comencé a visualizar la etapa que había recorrido en el día de hoy. Recordé las palabras de San Gozo ( propietario de una de las tabernas del Camino) . El secreto de llegar hasta Santiago de Compostela es vivir el día a día sin pensar en las etapas que te quedan y canta, sobre todo canta, karlos, canta siempre que te encuentres agotado.

Mientras recordaba estas palabras el sueño me invadió y recuerdo que me dormí pronunciando las siguientes palabras. " Helena , que Dios te bendiga"
(CONTINUARA)






miércoles, 16 de abril de 2014



Sábado 16 de Octubre de 2004


 Llovía a mares en Roncesvalles y se acercaba nuestra primera etapa y seguro que sobre mojado. La etapa Roncesvalles-Zubiri comprendía un recorrido de 22.14 Km. No estaba mal como principio del Camino y más para alguien como yo. que no estaba acostumbrado a caminar tanto, de hecho siempre me había parecido aburrido., aunque esto era distinto, tenía la oportunidad de iniciar una aventura, un comienzo por terreno santo pero con un final incierto. La verdad es que e ese momento no me planteaba llegar hasta Santiago, tan sólo quería llegar hasta Santiago, únicamente me planteaba recomponerme tras la pérdida de mi padre y mi ruptura sentimental pero sobre todo , encontrarme a mí mismo. Sólo quería andar, llorar, pensar y cerrar mis heridas.

Cada tramo andado era para mí un descubrimiento. El paisaje que se abría ante mis ojos era totalmente distinto al que estaba acostumbrado, no era el paisaje que acostumbraba a ver en mi Sur, en mi Cádiz. Pasé de ver el mar y terreno llano a un paisaje repleto de colorido, de naturaleza, de colores ocres y vegetación propia del Norte español en otoño.

El camino que pisaba era irregular, formado por guijarros y barro. A medida que avanzaba se abría ante mí un inmenso bosque compuesto por hayas y pinos negros además de grandes extensiones de verdes pastos que formaban un gran prado dónde pacían vacas y ovejas. Era estar en el paraiso, sólo escuchaba el canto de los pájaros y olía a naturaleza, me gustaba mucho estar en ese lugar.

De repente oí la voz de Helena que me pedía que me adelantara y acelerara el paso ya que ella se iba a quedar atrás por culpa de unas ampollas en el pie derecho que le impedí andar a mi ritmo.
Aproveché la soledad de la que disfrutaba al separarme de Helena para conversar con Dios y con mi padre. 
Todo lo que quería era entregar a Dios mi vida, que la arreglara , que hiciera con mi vida su historia y que me ayudara a vencer las dificultades del Camino. Deseaba que me poseyera del suficiente disercimiento para poder hacer las cosas bien y tomar las decisiones correctas.

Más tarde recordé a mi padre, lo llamé , grité su nombre y le dije cuánto lo amaba. ¿Por qué te fuistes así? ¿Por qué te fuistes tan pronto?. No sabes cuánto me habría gustado poderte contar lo bonito que es el Norte de España, tú que siempre soñastes con venir algún día por estas tierras, pero que nunca, desgraciadamente llegaráas  a conocer.. Papá te quiero tanto..... Las lágrimas comenzaban a brotar por mis mejillas pero traté de resistir la emoción y proseguí con fuerza el Camino por el hermoso entorno que me ofrecía la etapa.

La noche anterior , llamé a mi hijo Javier por telefóno, pero su madre no quiso ponerme con él ( no está en casa) fué su respuesta.No necesito que nadie pague la pensión de tu hijo y menos esa mujer( refiriendose a mi amiga y vecina Montse), según ella , Montse era mi novia y yo estaba haciendo el Camino para darme cuenta de cuanto la queria ( nada más lejos de la realidad).
De repente me sentí un imbecil, soy padre pero no me dejan disfrutar de mi hijo. ¿Por qué tanto daño? Sólo quiero lo mejor para Javier.

En este punto conviene destacar que justo antes de partir a mi viaje, dejé resuelto el ingreso mensual que tenía asignado para Javier como pensión alimenticia.

A día de hoy , año 2014, sigo padeciendo la tiranía y el secuestro emocional de una mujer que nunca aceptó una ruptura sentimental y cuyo mayor placer era hacerme daño con lo que más amaba, mi propio hijo.
!Buen Camino!, me dijo una pareja de franceses con los que me crucé . En ese momento desperté de mis pensamientos y volví a tomar conciencia de la realidad, debía de dar gracias por estar en un lugar tan sagrado y mágico y de poder ver tanta belleza a mi alrededor.

Observé que durante esta época del año , era el mes de Octubre, el Camino estaba bastante sólo, había pocos peregrinos a pesar de ser año Xacobeo ( año santo). La mayoría de personas solían hacer el Camino en verano aprovechando el buen tiempo y huyendo del frio y lluvias del otoño e invierno.

La etapa transcurría con ascensos y descensos, pocas rectas , lo que hacía que mis piernas sufrieran más de lo que desearía.
Entre la vegetación, asomaba un monolito con la imagen de la Virgen de Roncesvalles ante la que me detuve, descargué mi mochila, me arrodillé e hice una oración.

Dios te salve María
llena eres de gracia
el señor es contigo.....

Trás orar, cargué mi mochila y proseguí mi Camino. Divisé a unos metros una piedra alargada que indicaba los pasos de Carlo Magno y el monolito dedicado a un peregrino japonés , fallecido a la edad de 65 años que falleció haciendo el Camino de Santiago.

Por fín , aproximadamente a las tres de la tarde llegamos a un albergue en la ciudad de Zubiri.
Helena sacó a relucir su carácter navarro y logró darme alcance llegando al pueblo navarro. El albergue se llamaba Zaldilko y lo regentaba una jóven madrileña llamada María Eugenia.
El albergue era pequeño pero muy coqueto. Constaba de dos habitaciones con seis literas en cada una de ellas, conté dos duchas, un aseo, lavadora, secadora, máquina de café e internet.

En el albergue coincidi con Iñigo, un chico de San Sebastián y que más tarde almorazaría con nosotros. En la mesa coincidimos con dos chicas jóvenes , una brasileña y otra estadounidense.

Trás la comida me tumbé en la litera y tomé mi cuaderno de notas, quería escribir lo que había visto , la belleza del paisaje, mis sentimientos..... ¿Que estás haciendo? me preguntó Juán ( peregrino de Antequera). 
¿Escribes tus memorias?. No , le contesté, estoy escribiendo un libro que quiero dedicar a mi padre.
¿Como lo piensas titular? preguntó con curiosidad el antequerano. En realidad, le dije, no me gusta ponerle nombre a  la criatura antes de nacer, le contesté sonriendo, pero te diré como me gustaría titularlo. Se llamará "Diario de Ruta de un Peregrino".

Bueno , me gusta el título, suena bien , me dijo mientras salía de la habitación, se giró y me dijo mirandome a los ojos. Si algún día lo publicas , me encantaría compralo.
(CONTINUARA)


martes, 15 de abril de 2014

Caricatura que me hizo un peregrino en una taberna de Pamplona . El artista se llama  Iván y me hizo el retrato mientras nos tomábamos unos vinos y yo sin habermo dado cuenta .  



CAMINO A SANTIAGO

Eran las ocho y veinte de la mañana cuando Paulo salí de El Puerto de Santa María en tren con destino a Pamplona y haciendo escala en Zaragoza.
 

Se te olvida el móvil gritó Montse mientras caminaba en dirección hacia la puerta . Vaya... cierto, gracias. Montse era mi vecina, mi amiga, mi amante, que se yo.. más adelante escribiré un capitulo sobre ella.
 

Ya en el tren , con aires bruscos y prepotente se sentó junto a mi un señor de edad madura y piel curtida, me dió la sensación de ser un señor cuya vida no había sido fácil , se le notaba en las manos y en el rostro que había trabajado mucho , quise imaginar que era pescardor o agricultor.

Buenos días , le dije, a lo que me respondió con un ademán no demasiado cordial.
 

El trayecto a Zaragoza no se me hizo especialmente largo; en cuanto llego a la estaciópn noto el acento maño de las personas que pasan junto a mi y me empiezo a sentir un poco extranjero. Localizo un bar y doy buena cuenta de un bocata de tortillas y una pinta de cerveza. Dios mio que hambre tenía. Son cinco con cuarenta, me dijo la camarera. En ese momento , mientras engullía el bocata me acordaba del momento en que el padre Julio me entregó la Credencial de Peregrino, con la cual podría dormir en albergues e iglesias y recuerdo con cariño como me dió unas soberanas lecciones comparativas entre el significado de la Vida y el del Camino , me hizo ver cuantas cosas tenían en común y que con cada etapa que trascurriera, iba a descubri toda la magia y el misterio que el Camino conlleva.
 

Mientras el padre me relataba todo esto , me vino a la cabeza como mi ex mujer me deseaba lo mejor , Montse y su tristeza al marcharme y todos mis amigos y personas queridas deseándome todo lo mejor en esta aventura en la cual me embarcaba.
 

Para mí , hacer el Camino de Santiago, prentendía ser un peregrinaje en el que tuviera la oportunidad de curar todas las heridas abiertas y que en cierta manera no me dejaban ser feliz.
 

Era cumplir un sueño en dirección a una menta mediante un Camino que es la Fe , llena de dudas y decisiones como la vida misma..
 

Por fin el tren llegó a Pamplona , eran las 20,00 Horas aproximadamente. Los vagones estaban atestados de estudiantes de nutrición que llegaban a Pamplona para acudir a una convención. Ahí conocí a Bea y Ana quienes con su animada charla me hicieron más ameno el viaje.
 

Mi intención era tomar un autobús desde Pamplona con destino a Roncesvalles, lugar elegido como inicio de mi peregrinación,pero el tren llegó con retraso y perdí el autobús que debía de llevarme así que tuve que hacer noche en Pamplona.
 

Gira todo para abajo y darás con la Orden de las Hermanas Adoratrices, me dijo Helena. Helena era una chica rubia de ojos azules y grandes senos que se prestó a llevarme al albergue.
 

No me hizo ninguna pregunta , tan sólo se limitó a dejarme junto a la puerta del Convento. Si te apetece , después vamos un grupo de amigos a bailar salsa si quieres te apuntas y te enseño la ciudad. No es posible Helena, mira el horario cierran a las 22,00 horas y no dejan salir a nadie del recinto pero podemos quedar mañana si no te importa. Claro , dijo Helena. En ese momento nos dimos los núimeros de teléfono y propusimos la cita para el día siguiente.
 

En el Norte cuando quedamos , quedamos me dijo mientras desaparecía por la oscura calle de Pamplona.
 



CAPITULO 1: LA BOTELLA MEDIO LLENA

Así es cómo me sentía, trás la muerte de mi padre. Sin un resquicio para respirar. Desde que éste enfermó , tomé las riendas del negocio familiar sin descuidar tampoco mi trabajo como recepcionista en un Hotel, sufriendo una ruptura sentimental pues estaba recién separado, y con  un hijo llamado Javier, al que amaba más que a cualquier cosa en el mundo y al que apenas conseguía ver.


Pero aún con estas circunstancias ahí seguía , día trás día al pié del cañón, ocupándome de las guardias nocturnas mientras ni padre estuvo ingresado en el hospital víctima de un cáncer incurable, soportando ( Dios me perdone) a una madre egoísta y aquejada desde hacía años de una enfermedad mental con denominación y origen no muy claros...


Paulo, el más sensible, el que nunca hacía nada mal, el perfecto,con su mundo y su vida.. hecha un rompecabezas. Estaba y me  sentía sólo, con la botella demasiada llena y lo peor de todo, sin sentido de la vida...


"Peregrino de la Luz"

domingo, 13 de abril de 2014


Diaro de Ruta de un Peregrino.
 
Zaragoza, 13 de Octubre del año 2004.

El día anterior había sido un día de despedidas para mí, era la antesala a mi gran sueño, hacer El Camino de Santiago.


Pensé que escribiría un Diario de su viaje y que tenía que ir dedicado a alguien muy especial, una persona que hacía muy poco tiempo se había ido de mi vida, alguien en quien  confiaba y amaba, una persona cuya misión fue enseñarme el Camino de la Vida mientras vivió.. esa persona, era mi padre.
 

Va por tí este Diario papá, por ser la persona que más me ha influenciado en mi vida y sobre todo a la que más he amado.
 

Te quiero.